martes, 14 de agosto de 2012


Deuda pública y pago del BODEN 2012

por Héctor Giuliano 

El gobierno Kirchner ha hecho toda una puesta en escena tan exitista como engañosa en relación al pago de la última cuota de capital e intereses correspondiente al BODEN 2012: anuncio formal, discurso de la presidenta en la Bolsa de Comercio, reloj con cuenta regresiva, declaraciones del Ministro de Economía y eslogan acerca de una supuesta Independencia Económica y Desendeudamiento de la Argentina.



En este caso se pagaron unos 2.200 Millones de Dólares (MD)[i] que representan el 4.4 % del total de vencimientos de capital e intereses correspondientes al corriente año, que son 50.300 MD: 40.100 de capital más 10.200 MD de intereses, según los datos del Presupuesto 2012.

La cifra representa la cancelación de sólo el 1.16 % del total de la Deuda Pública del Gobierno Central, que al 31.12.2011 era oficialmente de 190.000 MD.

Pero el stock de la deuda no bajó con este pago porque las cancelaciones fueron hechas con nuevas obligaciones, tal como todo lo que se paga en concepto de capital.

Esas nuevas obligaciones para poder pagar deuda son contraídas con el Banco Central (BCRA) a cambio de Letras Intransferibles de la Tesorería que no tienen capacidad de repago demostrada.

Esto significa que la administración Kirchner sigue abonando puntualmente, a medida que le van cayendo los vencimientos de capital, sus compromisos con acreedores privados – en su mayoría, fondos especulativos de inversión – a través de mayor Deuda Intra-Estado.

Se trata de una peligrosa maniobra de “empapelamiento” de las agencias oficiales por parte del Tesoro, ya que estos entes públicos administran fondos que no son propios ni discrecionales por parte del gobierno, como es el caso del dinero del sistema previsional (que pertenece a los jubilados), de las reservas del BCRA (que hasta hace poco tiempo estaban para respaldar la Base Monetaria y hoy ya no pueden respaldarla), de las disponibilidades del Banco Nación (BNA, que están para dar créditos productivos a la actividad privada)[ii] y de los márgenes circunstanciales de caja que tienen diversos organismos nacionales para sus fines específicos (AFIP, Lotería, FFRE, PAMI y otros).   

El uso sistemático de reservas internacionales del BCRA para cancelar pagos a acreedores privados y organismos financieros internacionales (principalmente Banco Mundial y BID) – como se ha vuelto a dar con el pago de los Boden 12 - forma parte de la Política de Acumulación de reservas para el pago de Deuda Externa que viene llevando adelante el gobierno Kirchner.


LA INFORMACION OFICIAL.

En su discurso en la Bolsa del 2.8 anunciando el pago de la última cuota de los BODEN 2012 la presidenta Cristina Kirchner anticipó algunos datos que fueron consignados al día siguiente en un comunicado especial del Ministerio de Economía.

Este informe contiene muy pocos números en valor absoluto ya que prácticamente todos los datos se muestran en forma porcentual en relación al Producto Bruto y/u otras variables macroeconómicas, sin mostrar las cifras exactas que le sirven de referencia o base de cálculo.

Esta falencia es particularmente importante para poder comprobar cómo se llega a los importes de Producto Bruto, montos totales y desagregados de la deuda pública, deuda en poder del sector privado en moneda extranjera, intereses efectivamente pagados por año y evolución de los datos respectivos en el período 2002-2011.

Por otra parte, suponiendo que tales coeficientes se hayan obtenido ponderándolos en todos los casos a los valores de referencia de los años citados, existe el problema que las proporciones decrecientes que muestran todos los gráficos y cifras expuestas estarían fuertemente influidas por el tipo de cambio vigente a cada momento de corte, lo que distorsiona en la práctica las comparaciones de datos, ya que no es lo mismo, por ejemplo, comparar valores tomados del 2001 con el tipo de cambio 1:1 o del 2002 a 1.4 $/US$ que hacerlo contra un dólar hoy a 4.60 $.

Pero, repetimos, el principal problema es que todos los datos están mostrados en porcentajes, fundamentalmente en base al índice Deuda/Producto, cuya utilización constante y exclusiva por parte de las autoridades resulta tan discutible como engañosa[iii].

La única excepción a los cuadros que se muestran en porcentajes es el referido a la composición de tenedores de los BODEN 12 que se han pagado.

De este cuadro surge que del total abonado – casi 2.200 MD – el 78 % (1.700 MD) correspondió a tenedores externos y el 22 % (490 MD) a tenedores locales (de los que sólo 112 MD – el 5 % del total abonado – correspondía a cancelación de Deuda Intra-Estado).

La presidenta precisó que los tenedores extranjeros beneficiados por este último pago del BODEN 12 son fondos de inversión extranjeros – de Estados Unidos, Luxemburgo y también de Italia, Francia y Dinamarca – que compraron especulativamente los títulos a los tenedores originales, que eran los ahorristas argentinos atrapados en el Corralón por la Crisis de Deuda del 2001-2002; y que en su gran mayoría vendieron los títulos por razones de necesidad frente a la desvalorización de los mismos debida al default.[iv]  

Estos nuevos titulares de bonos – según comentó la presidenta - hicieron así un gran negocio con la plata de los ahorristas argentinos ya que les compraron barato los BODEN y ellos pasaron a cobrar los rendimientos a valores nominales.

Entre los fondos de inversión tenedores de BODEN 2012 – según una denuncia de Mario Cafiero y Fernando Pino Solanas – habría firmas tenedoras que son accionistas de empresas petroleras con actividades en las Islas Malvinas, lo que cae dentro de las penalidades de la Ley 26.659.


LA VOCACION PAGADORA.

El carácter triunfalista de la propaganda oficial en oportunidad de este pago de los BODEN 12 sirve de distractivo al hecho concreto que la deuda pública sigue aumentando – el incremento fue de 14.600 MD en 2011 y se prevé por Presupuesto 2012  que aumente otros 11.700 MD este año – y a que el gobierno Kirchner demuestra así su voluntad de cumplir a rajatabla los compromisos asumidos con los acreedores.

El Ministro de Economía Lorenzino fue muy claro al respecto cuando destacó que “este Gobierno ha normalizado la deuda y honrado todos sus pagos, cuota por cuota, durante los últimos 10 años”, agregando que “sólo por el Boden 2012 la cuenta que pagamos los argentinos demandó 19.600 millones de dólares.” (Comunicado de Prensa del 3.8.2012).

Estos pagos, así como todos los que se hicieron y se siguen haciendo a los acreedores financieros, a los organismos multilaterales de crédito (Banco Mundial, BID y CAF), al Fondo Monetario Internacional (9.530 MD a principios de 2006) y a bancos comerciales (con los que la deuda llega hoy a 6.600 MD), se cubren con Deuda Intra-Estado y toma de nuevas deudas, lo que compromete cada vez más los recursos fiscales condicionando en forma total y absoluta las Finanzas Públicas y la Política Económica general.

La Deuda ha devenido así el principal factor causal de la pérdida de los superávits gemelos de la administración Kirchner – fiscal y externo – pasando a situación de déficit en ambos casos: déficit fiscal creciente (fue de 30.700 M$ el año pasado y excedería con mucho esa suma a fin del corriente ejercicio) y déficit de la Balanza de Pagos (porque el excedente de la Balanza Comercial no compensa las salidas de divisas por servicios financieros y fuga de capitales).

Por eso, para sostener su política de pagos de la Deuda Pública, el Gobierno ha entrado de lleno en la toma de medidas de emergencia financiera para reunir la masa de divisas y de moneda local que necesita para cubrir los vencimientos que se le van produciendo:

a)      Emisiones masivas de pesos para comprar dólares que se destinan a pagar Deuda Externa y que luego se esterilizan con Lebac/Nobac que pagan el 14 % de interés promedio.

b)      Emisiones masivas de pesos para dar Adelantos Transitorios al Tesoro para atender el pago de deudas y de gasto público en general.

c)      Préstamos sistemáticos de reservas internacionales del BCRA al gobierno para el pago de Deuda Externa contra Letras Intransferibles que no tienen capacidad de repago y que han derivado en una baja fortísima de las Reservas Netas (que hoy estarían en el orden de los 13.500 MD).

d)      Corralito Cambiario en el mercado minorista, trabas a las Importaciones y demoras en las autorizaciones de transferencia de divisas al exterior, para poder acumular la mayor cantidad posible de dólares para poder atender los servicios de la Deuda Externa.

e)      Retraso cambiario relativo, por ritmo de devaluación menor que la inflación real, para permitir que el BCRA compre divisas más barato para reponer reservas que se prestan continuamente a la Tesorería para cubrir los vencimientos en moneda extranjera.

f)       Negación de los altos niveles de inflación interna, acentuados por la emisión masiva de dinero para atender los servicios de la Deuda, en pesos y en divisas; y para atenuar los pagos de los compromisos en pesos ajustados por CER.

g)      Modificación de la Ley 23.928 de Convertibilidad, de la Ley 24.144 de Carta Orgánica (CO) del BCRA y disposiciones conexas, para dar cobertura legal al funcionariado superior interviniente en esta política de pago de Deuda.

Con toda esta batería de medidas, la administración Kirchner vive pateando para adelante la nueva Crisis de Deuda que, por un lado, es de naturaleza estructural o institucional – la existencia de un sistema de Deuda Perpetua, destinada a ser continua e inexorablemente refinanciada por falta de capacidad de pago – pero en lo inmediato o reciente es producto del fracaso del Megacanje Kirchner-Lavagna del 2005, que comprometió pagos de capital e intereses, capitalización de intereses por anatocismo, indexación de deuda en pesos por inflación y, sobre todo, cupones ligados al PBI, que en su conjunto se han transformado en una “bola de nieve” impagable; sin contar con las obligaciones que se siguen tomando en todos los niveles del Estado (provincias, municipios, entes oficiales, BCRA, etc.).

A menos que – según fuera previsto con los canjes de 2005 y 2010; y según fuera anunciado en la hoja de ruta del ex ministro Boudou – la Argentina vuelva al Mercado Internacional de Capitales para reestructurar otra vez más su Deuda Pública.

Y para ello el gobierno Kirchner sostiene su política de pagos de la Deuda con emisión inflacionaria de dinero, con aumento de las tasas de interés de mercado derivadas del piso fijado por la deuda del Estado, con retraso cambiario para evitar un nuevo default de la Deuda Externa, con desfinanciamiento de la ANSES y demás agencias oficiales y con descapitalización del BCRA.

Todo ello puesto al servicio del cumplimiento de un sistema de endeudamiento perpetuo.


EN CONCLUSION.

El sistema de dominación financiera y política que utiliza la Deuda como instrumento de dominio se sostiene en tres patas: 1. Un  oficialismo de turno que se encarga de “administrar” temporariamente el mecanismo de la servidumbre de pagos, 2. Una pseudo-oposición política que le hace el juego al cuestionar problemas fiscales de coyuntura pero sin atacar el problema de fondo de una deuda impagable y, por ende, una deuda perpetua; y 3. Un mecanismo de formación de la opinión pública a través de medios de comunicación masiva – oficialistas e “independientes” - que desarrollan la función de “venderle” a la población la imagen que las cosas están bien en cuanto a la deuda, que la situación está bajo control y que la Deuda ya no es problema.

Así pasó con el discurso de Martínez de Hoz sobre la Deuda Externa bajo el Proceso Militar, así se repitió con los Acuerdos de refinanciación de Nueva York de 1985-1987 bajo la administración Alfonsín, así se dijo bajo el gobierno Menem-Cavallo después de la firma del Plan Brady de 1992-1993, así se volvió a saludar el compromiso de apoyo de grandes bancos (luego incumplido) frente al Efecto Tequila de 1995, así se volvió a repetir con el Megacanje Cavallo-de la Rúa del 2001 – sólo pocos meses antes del default – y así volvió a ser presentado ahora ante la gente con el Megacanje Kirchner-Lavagna de 2005, que ha fracasado por imposibilidad de pago y ha llevado a la actual nueva Crisis de Deuda que vive la Argentina y que la administración Kirchner trata de contener a través de medidas desesperadas de emergencia financiera que se sostienen, en definitiva, en un mecanismo de Deuda Intra-Estado que desfinancia el Sistema Previsional, descapitaliza el BCRA y vive “desviando” fondos de las Agencias Oficiales en función de las necesidades de caja del Fisco para el pago de los servicios de la Deuda.

La teatralización gubernamental en oportunidad del pago de la última cuota del BODEN 12 es un capítulo más dentro de este proceso distractivo sobre la gravedad del problema de la Deuda. 

Y la situación en esta materia debe ser muy grave a los ojos de la propia administración Kirchner para que el gobierno deba recurrir a tan grosera manipulación de informaciones frente a la nueva Crisis de Deuda que afronta nuestro país.


[i] Las siglas MD/M$ significan siempre Millones de Dólares/Pesos respectivamente. Los importes se toman con redondeo, por lo que puede haber mínimas diferencias entre totales y sumatoria de términos.

[ii] Es una paradoja que la presidenta exija a los bancos privados aumentar sus préstamos a empresas con destino productivo mientras el BNA – cuya carta orgánica fue modificada expresamente para garantizar su misión de asistencia financiera con esta finalidad para PYMEs – tiene un tercio de sus activos en Títulos Públicos, es decir, en dinero prestado al Estado.

Al mes de Abril de este año la cartera de títulos en cartera del BNA era de 56.500 M$ (equivalentes a 12.700 MD), sobre un Activo total de 178.300 M$.

A su vez, el BCRA – según Balance semanal al 31.7.2012 – tiene prestados al Tesoro 255.300 M$ (55.700 MD, al tipo de cambio 4.58 $/US$), sumando títulos públicos en cartera por 37.300 MD (170.800 M$) y Adelantos Transitorios al Gobierno por 84.500 M$ (18.400 MD). Es la mitad de su Activo (527.800 M$).

Y el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de la ANSES, que al 31.3.2012 totalizaba 209.000 M$, tenía el 60 % de dicho fondo prestado al Estado (más de 125.000 M$, equivalentes a unos 28.000 MD).

[iii] Conforme lo hemos explicado ya en varios de los trabajos anteriores, el coeficiente Deuda Pública/PBI no es un indicador representativo de la solvencia fiscal argentina: 1. Compara un numerador de deuda que es una magnitud financiera cierta con un denominador que es una capacidad económica estimada del país, 2. No incluye importes muy relevantes de obligaciones en cabeza del Estado Central que no figuran como deuda registrada (intereses a pagar, capitalización de intereses, indexación de deuda en pesos y cupones ligados al PBI; e incluso omite los reclamos de holdouts o tenedores que no entraron en el Megacanje Kirchner-Lavagna de 2005-2010), y 3. Reduce arbitrariamente los términos de comparación porque toma como denominador el PBI Nacional pero no toma en el numerador la Deuda Pública Nacional, que incluye también la deuda de provincias y municipios, empresas del Estado, organismos nacionales, fondos fiduciarios, deuda cuasi-fiscal del BCRA y juicios contra el Estado con sentencia en firme (por juicios locales y en el extranjero).

El gobierno Kirchner se jacta de haber reducido el índice Deuda/PBI (D/PBI) a un 42 % 179.000/428.000 MD), pero no suministra información sobre el monto, siquiera aproximado, de esta deuda nacional, que - incluyendo la deuda no registrada - podría duplicar la deuda oficial del Estado Central.

Por último, la relatividad del valor de este ratio D/PBI está demostrada empíricamente por la Crisis de Deuda del 2001: a esa fecha el índice era también comparativamente “manejable” - un 55 % del PBI (145.000/264.000 MD) - pero la Argentina entró en default por el problema de su perfil de vencimientos, como se le presenta hoy nuevamente (con y sin Deuda Intra-Estado).

[iv] Los BODEN 2012 fueron emitidos originariamente para compensar la pesificación asimétrica del 2002: la mayoría fue destinada a bancos (pese a que éstos, en su conjunto, durante el año 2001 habían fugado del país capitales que vaciaron las reservas del BCRA por más de 20.000 MD) y menos de la mitad fue para compensar a los ahorristas. En total, se terminaron emitiendo 17.600 MD de títulos BODEN 12, por los que se pagaron unos 2.500 MD de intereses.

Posteriormente, en el 2005, también la administración de Néstor Kirchner emitió Bodenes, con fecha de vencimiento 2015, por valor de 5.800 MD. La casi totalidad de estos títulos fue comprada por el gobierno de Venezuela e inmediatamente vendida en el Mercado a inversores privados (devengando un rendimiento real del 15 % anual en dólares).

Una idea y 140 caracteres


por Mariano Rovatti

“No hay ideas”. “Nadie formula propuestas”. “No se elaboran planes alternativos”. Quejas frecuentes en el ámbito de la política argentina, donde todo se va resolviendo sobre la marcha, tanto en el gobierno como en la oposición. Pero ¿hay alguien dispuesto a leer una propuesta? ¿quién se toma el trabajo de leer un documento de diez carillas? ¿hay personas que cotejen ideas? ¿la imagen ha sustituido a la idea?  ¿vale la pena el esfuerzo de plasmar conceptos en palabras escritas? ¿puede un libro ser sustituido por un video? ¿puede ser reemplazado el papel por la tecnología on line?

La multiplicación de los medios de comunicación aumentó exponencial –y a veces- artificialmente el material informativo. Todos nos vemos bombardeados por abundante cantidad de noticias, comentarios, operaciones mediáticas, etc.

Además, para las personas que trabajan, el tiempo libre es cada vez más escaso, por lo que se reduce sustancialmente el tiempo disponible para la lectura de textos con cierta profundidad.

¿Cómo hacer para ganar la atención del lector? La competencia es feroz ante el material de lectura disponible en diarios, revistas, libros, Internet, y entre éstos y la radio y la televisión.

Esta situación exige al redactor un brutal poder de síntesis, sacrificando profundidad de análisis en pos de llegar a despertar interés en el destinatario.

Pero también –a veces- es necesaria determinada extensión en el análisis para explicar y entender un problema, debiéndose apuntar alto en el nivel del mensaje. Cuando ello es indispensable, hay que admitir que gran parte del público quedará al margen del mismo.

El riesgo de ésto es banalizar los temas, tratándose cuestiones de fondo de manera liviana. Es muy difícil evitar este inconveniente, sobre todo cuando también se verifica un deterioro del nivel cultural promedio de la población.

Para el mundo de la política, el desafío no es optar entre una forma u otra de decir, sino en desarrollar un plan integral de comunicación de contenidos a través de todos los medios disponibles: libros, diarios, revistas, televisión, radio, Internet…y dentro de ésta, las versiones on line de todas las demás, más las redes sociales, lugar de encuentro virtual de miles de personas de todo el mundo en simultáneo.

Facebook representa un extremo basado en la imagen, y Twitter en la palabra, en su mínima expresión. En la Argentina, el kirchnerismo, el macrismo y el sciolismo le han sacado ventaja al resto en esa tendencia, que a la vez también ha sido funcional a un proceso de pérdida de compromiso de la clase dirigente con valores, ideales y principios. Cuanto menos se diga, menos se compromete, pero también cuanto más se dice menos se logra llegar al destinatario.

Por ello, mal que nos pese, la cualidad de expresar conceptos simbólicamente a través de imágenes y/o de una sola frase debe ser explorada y desarrollada por cualquier proyecto político con ambiciones de poder. 

Impunidad es la palabra


por María del Rosario Miel Asquía 

“Eventos culturales” es la mejor explicación  que encontraron los poderes constituidos para justificar y describir los últimos hechos protagonizados por  la impronta K  autodenominada Vatayon  Militante, que  en ese marco convoca a sus huestes adictas y reclutadas a celebrar la noche

La gravedad  de esta realidad nos sobresalta, alarma y excede.
Una vez más, la Presidenta sale al cruce y trata de minimizar y explicar  el tema, rodeada de una siniestra corte de obsecuentes, fundamentalistas, apludidores y oportunistas…explicar, qué? La salida sistemática y programada de reclusos de diferentes unidades, población previamente relevada  desde hace meses, con el visto bueno de la justicia, es solo con fines de inserción social como parte de un plan diseñado por especialistas?
Esta vez fue demasiado lejos y las consecuencias ni siquiera pueden estimarse hoy, solo una evaluación de lo que sabemos. Un hecho  grave por donde se lo mire, desde Vázquez, desgraciadamente popular, nexo y referente  de tragedias  latentes en la sociedad,   una de las caras más vistas por estos días en videos subidos a todos los medios, hasta las explicaciones que brindan  funcionarios de todas las áreas.
Tres elementos sobresalen y deben preocuparnos, la liviandad de la presidenta  y su sistemática costumbre de echarle la culpa a un Scioli conspirador, la impunidad del accionar de cientos de personas movilizadas y las consecuencias en un futuro no tan lejano.
Parece que se han abierto las puertas de un infierno  invisible que estaba entre nosotros, el reflote histórico de los 70 amenazando con la formación de milicias populares, gran coincidencia ideológica con los actores de hoy.
Mas allá de la lectura política que le demos, un básico sentido común nos dice que algo no está bien, que estos movimientos ni son normales ni tienen por objeto proyectos re socializadores , que se trata de operaciones con determinado objetivo.
La legitimación de estos hechos, debe preocuparnos y mucho, una vez más el gobierno  K pone en peligro a los ciudadanos, aun conociendo estos hechos, podemos pensar que se están formando fuerzas de choque para que actúen en algún momento, ante hipótesis, fruto del delirio persecutorio que desciende el poder, enfrentándolos con el pueblo.
La Justicia por su parte volvió a hacer circular por estos días su opinión, remarcando lo que el Tribunal Oral en  lo Criminal N ° 20 señalara  en el caso Vázquez como “salida para participar en evento cultural”, haciéndolo extensible a otros cientos de reclusos y dándole letra al libreto presidencial. 
Las magras explicaciones no alcanzan,  por el contrario complican una situación dañosa para todos los que no cerramos los ojos ni asentimos, cómplices.
Profundizar en este pensamiento, nada trasnochado, potencialmente posible conociendo el estado general de caos y avasallamiento que sufrimos en todos los ámbitos, político, económico, social, y la clara percepción de un desborde de poder  casi amoral, es la tarea que nos queda, buscar hasta hallar el porqué de los hechos y comprometer mas voluntades pensantes  es la tarea de una oposición seria y plantada. Las  cosas se complican y se necesita respuesta.
Solo la ceguera y la impunidad permiten que en un estado, llamado de derecho, estos hechos tengan marco y desarrollo, legitimados subjetivamente por un poder que cree poder manejar voluntades, vidas, patrimonios y destinos a su antojo.
Paranoia e impunidad es la fórmula perfecta del vamos por todo.

Responsabilidades bajo tierra


por Fabián Rapolla 


El sistema de transportes  representa una de las grandes postergaciones de la realidad política nacional. Y tiene su manifiesto  profundo,  injusto, en los ferrocarriles y subterráneos.  Asoma, irritante y lapidario, el  paro de subtes, en una ciudad colapsada, con efectos que suelen ser devastadores para la rutina y los nervios de millones de
             porteños y                      
                                             bonaerenses.








Un sistema de subtes obsoleto, incapaz de dar respuesta a las necesidades de más de quince millones de personas que diariamente circulan por Buenos Aires. Un sistema de subtes que ha sido objeto de subvención y recaudación a costa de una fuerte desinversión, materia por demás recurrente del kirchnerismo. 
Subsidio del costo del viaje cuya única finalidad es el rédito político y recaudación de los amigos del poder a cargo de la empresa, quienes solo se han limitado a invertir lo esencial para que el servicio continúe funcionando con un mínimo de normalidad. Trenes que salen de circulación- de hecho Metrovías acaba de anunciar el retiro de 20 formaciones-, lo que afecta directamente la frecuencia de viaje de las unidades disponibles. Unidades incomodas, gente viajando abarrotada en horas pico, instalaciones sanitarias en pésimo estado, andenes sucios, y una legión de pungistas “trabajando” con sospechosa impunidad complementan el marco de un servicio que suele ser privilegiado por su rapidez, eficacia y seguridad, en el resto del mundo. 
 Una vez más la gente pagando el precio de una disputa mezquina entre el gobierno nacional y el gobierno de la ciudad. Bien sabemos que el gobierno de la nación muy poco ha hecho nada con el desarrollo de la vía subterránea en todos los años que lleva en el poder. Ahora bien, una vez firmada el acta de transferencia del servicio de subterráneo a la ciudad de Buenos Aires el 3 de enero pasado, el gobierno porteño de modo inadmisible sigue negando su responsabilidad en la gestión de autoridad y contralor de un servicio, que vaya paradoja, se encuentra dentro de los límites de la ciudad.
Macri tiene aspiraciones presidenciales, pero no se anima a administrar una red subterránea pequeña, con una excusa pueril y hasta insultante, dice que no se han respetado las inversiones. Los que hacemos política sabemos que en la Argentina, suelen no respetarse los compromisos; sin embargo,   ello no es óbice para asumir las responsabilidades que le competen a cada quien. La decisión de aumentar el costo del boleto de subte surgió del gobierno de la ciudad. Ese es una acto de soberanía política. De ejercicio del poder. ¿Cuándo firmó el acta, no sabía Macri, que las inversiones no se habían hecho?
La firma del acta y el aumento del pasaje son hechos de una inequívoca voluntad: hacerse cargo del subte. Entonces, debe ser completado desarrollando plenamente las obligaciones que lo acompañan. Los subtes están dentro de la ciudad y son, inclusive una buena oportunidad para el macrismo de demostrar que con ingenio y buena administración, se puede mejorar un servicio largamente postergado.
Pero se ha elegido el camino del cristicinismo, entrando en su juego de  pelea, eligiendo la confrontación. Pareciera que si asume la conducción del subte se estaría dejando avasallar por el poder kirchnerista. Ya sabemos que Cristina solo gobierna para los que están con ella. Los porteños somos rehenes azorados de sus políticas segregacionistas y desgastantes para con el macrismo. Cristina gobierna para sí, pero Macri cae en lo mismo; ambos miran su propio ombligo y terminan siendo prisioneros de su propia intolerancia.
Y siempre la gente como victima del salvajismo político. Los trabajadores del subte que no acceden a su bien ganado aumento salarial (la pretensión es de un 28%, un nivel acorde al del resto de los trabajadores) Y la población general que sucumbe ante un tránsito desbordado, causando innumerables padecimientos de toda índole. Si la excusa de que “mi antecesor no hizo lo que prometió”, fuera políticamente válida, aún seríamos una aldea.
La grandeza del General Perón residía en que siempre gobernó para la unidad nacional. Y fue lo que nos transmitió permanentemente: gobernar para la gente. Perón gobernó para todos los argentinos y estableció un proyecto para el conjunto.
Quisiera cerrar con un poco de peronismo para todos, especialmente para Cristina y Mauricio: “El espacio donde operará el movimiento peronista será entonces el de la comunidad integralmente concebida  con una vocación totalizadora y el partido, en tanto, una institución más… “.(Política y Estrategi as, pag. 53)  A  estudiar…

Panorama actual agosto 2012


Por Ricardo Auer


Escribíamos ya allá por Septiembre del 2008 sobre temas actuales: “La CGT de Moyano ha pedido el aumento del salario mínimo básico a $1.250.-, la eliminación del impuesto a la ganancia para los obreros sindicalizados y un aumento de salario familiar. Además, el gremio de Camioneros quiere reabrir su paritaria para subir sus salarios, cuyo aumento nominal del 19,5% de marzo 2008, ha quedado superado por la inflación verdadera. …. Su incumplimiento llevará primero a la agitación y luego a la movilización. …No es casualidad que lo que pensaba Moyano desde hace muchos años, ahora comenzó a decirlo en voz alta: el asesinato de Rucci y de tantos otros, también son delitos de lesa humanidad. (el viernes 10/08/2012 la justicia nacional dictaminó que ese  asesinato, cometido por los Montoneros, no era de lesa humanidad y que había prescripto)

También decíamos en 2008: El pueblo se está cansando, por saturación de problemas, casi al grado de la exasperación y podría solicitar “soluciones” más rápidas que la dulce espera de las elecciones parlamentarias, especie de Torneo Clasificatorio para las Grandes Ligas, las presidenciales. La pregunta que hoy hay que hacerse es: ¿el ciudadano común aguantará bancarse 3 años mas de inflación, inseguridad, caos vehicular, incertidumbre, corridas cambiarias, y tantos otros males cotidianos en forma simultánea? No terminará involucrando en su sentencia a un gobierno sin rumbo, también a aquellos especuladores o espectadores, que, con el pretexto de defender la sagrada democracia, no superan el parloteo diletante, crítico o de analista externo o del amontonamiento de “viejos y gastados dirigentes”. Cualquier semejanza con la actualidad NO es casualidad.

La realidad argentina transcurre desde hace años con una insoportable levedad para resolver al menos ALGUN problema. Todo problema se oculta bajo la alfombra, simulando soluciones, que estallan nuevamente al poco tiempo. El deterioro en todos los órdenes continúa. Los escándalos se suceden en una sucesión imparable, de tal forma que el siguiente enmascara al anterior. Sin embargo el pueblo no termina de cansarse de tanta Mala Praxis de la clase política, que sería intolerable en otras profesiones, como cirujanos, abogados, ingenieros o arquitectos.

Hay suficientes motivos para despedirlos: los servicios de transporte ferroviario son calamitosos; los hospitales se mantienen sólo por la buena voluntad de los médicos, que sufren múltiples y absurdas  agresiones; los docentes tienen que defenderse de alumnos que se drogan; los presos salen a hacer actividades “culturales” para reinsertarse en la sociedad (cual?);  el dinero nacional lo emite una sociedad fantasma de dueños desconocidos;  los barrabravas del fútbol son elogiados por la presidente; los 52 muertos de la tragedia de Once, son culpables por viajar “todos adelante”; el Subterráneo de BA no es gestionado por nadie (está en el limbo); las guerras políticas son toleradas por la población como algo “normal”. En cualquier lugar del mundo, cualquiera de  estos hechos o dichos provocaría una crisis política fenomenal. Acá todo vale. Se acepta lo que no toleraría hasta un practicante “yoga” del budismo “zen”.

Algo está podrido en Argentina y nadie lo quiere, o se anima, a resolver. El oficialismo se cierra sobre sí mismo, dándole “todo el poder a Cristina”. Al menos, cuando la dirigencia fracasaba, Lenin recomendaba, un poco mas democráticamente, darle “todo el poder a los soviets” (basismo). El “escudo” de Cristina, utilizado por algunos pícaros internos para lograr ventajas personales, puede dar algunos resultados, pero éstos son cada vez más desgastantes en términos de salud y vulnerabilidad. El recurso de la “cadena nacional” ya se está agotando por saturación. La gente ya no la escucha. La concepción de “todo el poder a Cristina” revela también que, por ahora, no hay recambios viables dentro del oficialismo. Por eso ya se preparan rutas alternativas. Por el lado de la oposición, poco se observa, ya que privilegian el sostenimiento de sus privilegios personales y su “carrera política”. A muchos de ellos les encanta bailar en la cubierta del Titanic.
Los jóvenes tienen una cuota de idealismo mayor que los adultos; probablemente porque es un insumo vital para seguir en la lucha por la vida.  Debe reconocerse que el oficialismo ha sabido transmitirle una alegre “sensación” de transgresión, lo cual implicaría un acercamiento emocional positivo. Además hubo en los primeros años, un aumento del empleo. Sin embargo la realidad actual, luego de 9 años de gestión, choca contra esa simpatía emocional. El empleo juvenil está estancado; el porcentaje de los “ni-ni” (no estudia/no trabaja) es mas del 30%. El fracaso de las escuelas argentinas en lengua y matemáticas es calamitoso. La drogadicción esta haciendo estragos en las capas más humildes y expuestas. Tenemos ya la tercera generación de gente que vive del subsidio público (planes sociales). El narcotráfico se expande sin demasiados impedimentos. El panorama dista  de ser positivo.

Se dice habitualmente que las situaciones económicas determinan el comportamiento político de las sociedades. Dicho de otro modo, si hay crecimiento y hay consumo, la gente vota al poder de turno. Si la próxima cosecha de soja, cuyos dólares entran en caja justo antes de las elecciones parlamentarias 2013, es muy buena, ganaría nuevamente Cristina, la Cámpora y el FpV. El oficialismo apuesta a eso. La pregunta que uno se hace es si seguirá el pueblo argentino aguantando cachetazos, mientras le den algo para consumir, o no lo hará. La sociedad debería preguntarse si tener un nuevo electrodoméstico, un plasma o un cambio de auto es un mejor proyecto de vida que intentar que haya mas empleo, mas seguridad, menos inflación?. Priorizamos el bolsillo en lugar de la vida misma?

Una sensación de miedo, inyectado desde el poder, recorre el espectro social, intimidando a políticos, economistas, periodistas, medios de comunicación, empresarios grandes, medianos  y pequeños. La sociedad se mantiene en silencio, haciendo catarsis en redes sociales, en blogs de Internet o simplemente mascullando en círculos familiares o de amigos. La inyección de miedo intenta remplazar al razonamiento y al debate. Es la continuación del sostenimiento de la verdad “por otros medios”. Aceptar el miedo como arma política es convertirse en un dócil rebaño, sin intereses ni valores particulares.

La sociedad actual se ha convertido en un conjunto de seres humanos “solos” que esperan su transcurrir sin trascendencia. La verdad se mezcla con lo falso. Lo bueno con lo malo. Lo honesto con lo deshonesto. El relativismo festeja. Toda mala realidad puede ser comunicada (y creída) como “brillante”. Sociedad que se desgarra las vestiduras por una seguidilla de crímenes aberrantes, que luego olvidan pasados el fin de semana; sociedad anestesiada, entretenida con el rating televisivo, apática, individualista, consumista de “novedades”, conservadora (aceptadora del statu quo). Seremos una sociedad así?  Somos en el fondo, iguales que nuestros representantes?. Todos tenemos la respuesta.